¿Por qué tan enamorados de la Corte Penal Internacional los criminales internacionales yihadistas?
OLP/Fatah (ahora mejor conocida como la ‘Autoridad Palestina’) ROGÓ ser incluida bajo la jurisdicción de la Corte Penal Internacional; luego de lograrlo, Hamas y la AP ambas lo celebraron.
Las noticias están llenas de este titular: la CPI ha acusado formalmente al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y al exministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, por supuestos ‘crímenes de guerra’ en Gaza.
Mucha gente piensa que esto significa que Israel realmente cometió tales ‘crímenes de guerra.’
Pero, ¿sería la CPI un tribunal honesto? ¿O se trata quizás de un tribunal corrupto y políticamente motivado?
Pronuncia estas palabras: ‘Corte Penal Internacional.’
Suena importante, ¿verdad? ¡Serio! Como algo… bueno. Es una corte de justicia, para empezar. ¡La justicia es buena! Y es una corte penal. Uno imagina que persigue a los peores criminales. Además, es internacional, lo que sugiere que reúne a las naciones—naciones que, se atrevería uno a suponer, envían allí a sus mentes jurídicas más brillantes—.
Suena impresionante.
Y esa apariencia tiene un efecto. Ahora que la Corte Penal Internacional (CPI) ha emitido orden de arresto contra el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y contra el exministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, por supuestos ‘crímenes de guerra’ en Gaza, muchas personas suponen—basándose en la impresión creada por la presunta autoridad institucional de la Corte—que la acusación debe ser cierta.
¿Lo es?
Ya he abordado esa pregunta en otro texto:
Aquí abordaré una pregunta diferente pero relacionada:
¿Cuál es la naturaleza de esta Corte Penal Internacional o CPI?
Específicamente, preguntaré:
¿Acaso es honesta la Corte Penal Internacional? ¿O se trataría, quizás, de un ‘tribunal canguro’?
Wikipedia define ‘tribunal canguro’ de la siguiente manera:
“un tribunal que ignora las normas reconocidas de derecho o justicia [y/o] tiene poca o ninguna reputación oficial en el territorio…”
Por ejemplo, los procedimientos judiciales de los Juicios de Moscú (1936–1938), durante la Gran Purga de José Stalin, cuando destacados bolcheviques fueron acusados de crímenes implausibles, torturados luego hasta que confesaron y, en juicios con guión, condenados a muerte o encarcelamiento.
Otro ejemplo sucedió a la postre de las Leyes de Nuremberg de 1935, cuando los tribunales en la Alemania nazi aplicaron leyes de pureza racial y persiguieron a judíos, disidentes políticos, y otros.
Estos ‘tribunales canguro’ involucraron procesos pseudo-legales con veredictos predeterminados cuyo propósito no era producir justicia, sino legitimar un régimen totalitario y dar la apariencia de legalidad institucional.
Pero, siendo francos, los regímenes totalitarios no son los únicos culpables de establecer ‘tribunales canguro.’
En 1947, el Comité de Actividades Antiestadounidenses (HUAC - por sus siglas en inglés) en la Cámara de Representantes de EEUU, inauguró una tendencia que luego fue inmortalizada por el senador Joseph McCarthy: el macartismo. Los tribunales y audiencias asociados con el macartismo en los Estados Unidos son ejemplos infames de ‘tribunales canguro.’ Muchas acusaciones eran por supuestos ‘crímenes’ de pensamiento, expresión, y asociación—todos comportamientos protegidos por la Constitución de EEUU—. Las acusaciones eran políticamente motivadas, y la mayoría eran falsas de todos modos. El debido proceso fue abandonado: a las personas acusadas se les negó la oportunidad de confrontar a sus acusadores o presentar defensas completas, y se les animaba a acusar a otros para liberarse. Las audiencias a menudo se basaban en informantes anónimos (¡algunos de ellos informantes profesionales del FBI!) y pruebas dudosas. Además, eran presuntos culpables—en lugar de inocentes—poniendo la carga de la prueba sobre los acusados. ¡Esto continuó de alguna forma hasta principios de la década de 1970!
Lo anterior es una advertencia que inspira cautela. Si bien países democráticos participan en la Corte Penal Internacional, ello no garantiza que sea un tribunal hecho y derecho. Por lo tanto, debemos examinar este asunto cuidadosamente antes de decidir que la CPI es un tribunal legalmente riguroso en lugar de un ‘tribunal canguro’ políticamente motivado.
Entregaré una resolución definitiva—prometido—.
Comienzo con la siguiente observación:
Los jefes de Hamas y de la ‘Autoridad Palestina’ (AP) adoran a la Corte Penal Internacional.
¿No es curioso? Comencemos por aquí.
¿Por qué estarían Hamas y la Autoridad Palestina tan enamorados de la CPI?
Documentemos primero la afinidad. Se informó en 2021 lo siguiente:
“Hamas, el sábado, dio la bienvenida a un fallo de la Corte Penal Internacional que allana el camino para una investigación por crímenes de guerra contra Israel ... El primer ministro de la Autoridad Palestina, Mohammed Shtayyeh, el viernes elogió [también] la decisión, llamándola ‘una victoria para la justicia y la humanidad, para los valores de la verdad, la equidad y la libertad, y para la sangre de las víctimas y sus familias.’ ”1
Es posible que estés pensando: ¡Pues claro! Hamas y la Autoridad Palestina son enemigos de Israel, por lo cual quieren a Israel investigado por la CPI. ¿Eso que tiene de raro?
Pero hay un problema lógico aquí.
No me refiero a que la ‘Autoridad Palestina’ haya invocado “la justicia y la humanidad … [y] los valores de la verdad, la equidad y la libertad.” (Pero bien por ti si lo pescaste.)
No, lo que quiero decir es lo siguiente:
El fallo que Hamas y la AP celebraron es uno donde la CPI reclamaba jurisdicción sobre aquellos territorios que la Corte llama ‘Palestina.’
En otras palabras, Hamas y la AP celebraban que la CPI hubiera reclamado jurisdicción sobre ellos.
Pero aún más asombroso es esto:
Fue la Autoridad Palestina quien solicitó formalmente que ‘Palestina’ fuera incluida bajo la jurisdicción de la CPI.2
Al menos esto es asombroso si suponemos que la CPI es un tribunal honesto. ¿Por qué? Bueno, porque Hamas y la AP son organizaciones terroristas.
Dicha afirmación no presenta dificultad respecto de Hamas, cuyo ataque más mortífero—la masacre y toma de rehenes civiles israelíes sin precedentes del 7 de octubre de 2023—es reciente y famoso. Sin embargo, mucha gente ahora está confundida sobre la ‘Autoridad Palestina,’ por lo cual me permito una aclaración.
La AP es en realidad OLP/Fatah. Han matado judíos, por supuesto. Madres. Padres. Bebés. Ancianos. Personas comiendo pizza. Personas viajando en autobús. Niños aprendiendo en la escuela. Médicos que salvaron la vida de un terrorista de la OLP. Han matado dentro de la llamada Línea Verde y fuera de ella. Y en otros lugares (por ejemplo, Múnich). A cualquier judío. A todos los judíos. Aquí, allá, en todas partes. Como una versión satánica de Dr. Seuss.
OLP/Fatah también ha cometido todo tipo de crímenes contra los occidentales. Han secuestrado aviones de Estados Unidos, Reino Unido, Suiza, Alemania, Francia e Israel. También secuestraron un barco italiano. OLP/Fatah ha asesinado a ciudadanos de los países mencionados, así como a ciudadanos de Bélgica, Grecia, Australia, Japón y los Países Bajos.
OLP/Fatah también ha matado a muchos musulmanes. Han asesinado musulmanes en Irán, Egipto, Jordania, Siria, Líbano, Kuwait, Sudán, y Túnez. Han provocado guerras civiles en Líbano, Jordania, y Siria. Y han asesinado a árabes musulmanes en Israel—muchos—dentro y fuera de la llamada Línea Verde. Dondequiera que OLP/Fatah gana poder, muchos musulmanes se convierten en objetivos—sobre todo los árabes palestinos—.
El circo mediático ha convencido a algunos de que OLP/Fatah cambió su naturaleza. Pero, contrariamente a sus promesas, OLP/Fatah no abandonó el terrorismo en 1993-94 cuando firmó los Acuerdos de Oslo que la trajeron dentro de Israel. Simplemente siguió adelante. Hasta el día de hoy, cada vez que un judío es asesinado por orden de los terroristas de OLP/Fatah, el perpetrador recibe un salario regular como compensación. Si el perpetrador muere, el salario va a la familia. Con este método, toda la cultura árabe palestina ha sido corrompida.3
“Como cualquier salario, los pagos a los prisioneros siguen una escala según la ‘calidad’ del acto. En este mundo, cuanto más atroz es el acto de terrorismo, mayor es el salario. Al establecer el nivel del salario, el sistema permite que los propios israelíes juzguen cuán espeluznante es el crimen. Cuanto más violento sea el acto terrorista, más larga la sentencia en prisión israelí, y por consiguiente, mayor es la compensación mensual [de la ‘Autoridad Palestina’].
(…) …los delincuentes más sangrientos, cuyas sentencias ascienden a treinta años o más, son recompensados con el salario más alto, 12,000 shekels al mes, o casi 3,400 dólares mensuales—hasta diez veces el salario promedio ganado por muchos trabajadores palestinos—.”4 (énfasis ‘mío)
A esto lo han llamado, en inglés, el programa pay for slay (‘pago por muerto’).
Y la Autoridad Palestina incluso paga salarios a los asesinos pertenecientes a Hamas.5
Entonces, OLP/Fatah, que ahora llamamos la ‘Autoridad Palestina’, son una bola de terroristas. Siempre han sido terroristas. Siguen siendo terroristas.
Pero Hamas y OLP/Fatah no son solo terroristas—son terroristas yihadistas—.
Nuevamente, la afirmación no presenta controversia en el caso de Hamas, porque dicha organización es famosa y orgullosamente yihadista. Pero si no lo sabías, tenemos un breve artículo sobre la cuestión:
Respecto de OLP/Fatah (la ‘Autoridad Palestina’), sin embargo, muchas personas en Occidente piensan que es secular. Están equivocados. Esto es lo que es cierto:
OLP/Fatah creó el Estado yihadista más importante: Irán.
Fue Yasser Arafat, Mahmoud Abbas, y el resto de OLP/Fatah quienes armaron y entrenaron a los guerrilleros de Ayatolá Jomeini en campos militares en Líbano durante los años 1970, preparándolos para la Revolución Islámica de 1979. Y después de poner a Jomeini en el poder, nuevamente fueron Arafat, Abbas, y sus secuaces de OLP/Fatah quienes ayudaron a construir las principales instituciones yihadistas de Irán, en particular SAVAMA, la policía secreta, que se emplea para aplastar a la población iraní, y el IRGC (Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica), gran exportador de terrorismo a nivel mundial y creador de Hezbolá.
Que nunca antes hubieras escuchado de esto no significa que no lo hayan explicado todo en la portada del New York Times en el periodo de 1979-1981. Lo hemos documentado aquí:
Así que los jefes de Hamás y de la Autoridad Palestina (AP) son todos terroristas yihadistas.
Esto importa porque los terroristas yihadistas no tienen objetivos políticos limitados; tienen objetivos ideológicos (‘religiosos’) maximalistas. Su intención es convertirnos a todos por la fuerza al Islam—o nos matarán—. No hay cosa alguna para negociar. Si parecen negociar, solo están fingiendo. En consecuencia, Hamás y OLP/Fatah se han convertido en dos de las organizaciones criminales internacionales más temibles.
Uno se esfuerza por entender, entonces, por qué Hamás y OLP/Fatah habrían de celebrar la decisión de la Corte Penal Internacional (CPI) que afirma su presunta jurisdicción sobre ellos, y también que OLP/Fatah, de entrada, haya solicitado ser incluida como ‘Estado Parte’ de la Corte.
Porque la razón oficial de ser de la CPI es ocuparse de crímenes que el sistema judicial de un miembro de la CPI no puede o no quiere procesar, y ése precisamente es el caso de Hamás y de la AP, que no irán a procesar a todos esos terroristas en su nómina. Así que la jurisdicción de la CPI sobre Hamás y OLP/Fatah—suponiendo que la CPI sea un tribunal honesto—los vuelve vulnerables en extremo. ¿Por qué celebran esto?
Si los peces hubiesen organizando una fiesta en el anzuelo, estaríamos igualmente asombrados.
Así que esto es una paradoja.
Ahora bien, una paradoja, para el científico, es intolerable—es evidencia de un defecto en nuestros modelos del Universo—. Para disipar ésta, propongo la siguiente hipótesis:
Hipótesis: Los jefes de Hamás y la AP—todos terroristas yihadistas—no consideran a la CPI un tribunal honesto; la perciben como un ‘tribunal canguro’ amigable con los yihadistas.
Hamas y la Autoridad Palestina (OLP/Fatah) creen que la CPI no es un problema para ellos, sino para Israel. Lo han dicho en público. Tras la admisión del supuesto ‘Estado de Palestina’ a la CPI en 2015, lo siguiente fue reportado por Al Jazeera, servicio de noticias propiedad de la familia yihadista Al Thani, señores de Qatar:
“[En cuanto a] la investigación de funcionarios israelíes por parte de la CPI, los palestinos confían en que ocurrirá más pronto que tarde, considerando ‘toda la atención a Palestina’ en la CPI.”6 (mi énfasis).
Discutiré ahora algunas evidencias en respaldo de mi hipótesis sobre la percepción de Hamas y de OLP/Fatah de una CPI a favor de yihadistas.
¿Qué hizo a los jefes de Hamas y OLP/Fatah ver en la Corte Penal Internacional (CPI) a una amiga del yihadismo?
Los jefes de Hamas y OLP/Fatah, pienso yo, probablemente se enteraron de algunos detalles biográficos sobre Fatou Bensouda, quien hasta hace poco fue Fiscal Jefe de la CPI.
“Fatou Bensouda creció en Banjul (Bathurst), Gambia [un país diminuto en la costa oeste de África], en una familia musulmana polígama con más de una docena de hijos.”7
Dado que la poligamia, como la yihad, es característica del islam ortodoxo, este detalle puede convencer a un yihadista de considerar a Fatou Bensouda—la responsable, de hecho, de admitir a OLP/Fatah a la CPI—como aliado natural. Pero esto va más allá de Bensouda, porque su reemplazo como Fiscal Jefe de la CPI es Karim A.A. Khan, cuya vida personal es resumida por Wikipedia de la siguiente manera:
“El padre de Khan, un dermatólogo consultor, nació en Mardan, Pakistán. Su madre, una enfermera registrada con el Estado, nació en el Reino Unido. Khan es miembro de la Comunidad Musulmana Ahmadiyya. Casó primero con Yasmin Rehman Mona, hija del cuarto califa de la Comunidad Musulmana Ahmadiyya, Mirza Tahir Ahmad. Actualmente está casado con Dato Shyamala Alagendra, una abogada malasia. Tiene dos hijos. Tiene una hermana y dos hermanos, uno de los cuales es el exdiputado conservador británico Imran Ahmad Khan.”
A menudo presentan a los musulmanes ahmadíes en medios como un movimiento pacífico. Pero nuestra realidad está fuertemente administrada, por lo cual siempre es mejor hacer nuestras propias investigaciones. Resulta que los comentarios ahmadíes sobre el Corán justifican la yihad violenta en ‘autodefensa,’ basándose en la siguiente sura coránica:
“Y si desean castigar a los opresores, castíguenlos en la medida en que han sido agraviados.”8 (énfasis original)
En la teoría musulmana ahmadí, entonces, la yihad violenta está autorizada—en ‘autodefensa’—cuando los musulmanes se sienten “agraviados” por los “opresores.”
Es relevante, por tanto, que los comentarios ahmadíes sobre el Corán consideren la creación de “el presunto Estado de Israel,” como lo nombran, un problema para todos los musulmanes, ya que se interpreta que “los musulmanes están siendo castigados” con el establecimiento del Estado de Israel.9
¿Y cómo deberían responder los musulmanes ahmadíes, según sus normas, a este ‘castigo’? Esto puede inferirse de cómo los comentarios ahmadíes sobre el Corán hablan de una Gran Batalla Final entre musulmanes y judeocristianos.
“Se le ha dicho al Santo Profeta [Mahoma] que el alcance y la esfera de su predicación … abarcarían en su órbita a cristianos y judíos … [lo que] excitaría una nueva oposición y los musulmanes sufrirían persecución por todas partes.”10
Sin embargo, según los comentarios, los musulmanes serán victoriosos, ya que los enemigos del Islam “enfrentarán un destino terrible.” Habrá una “guerra verdadera”—en oposición a una guerra metafórica—y “será librada contra la incredulidad [es decir, contra los ‘infieles’ no musulmanes] y sus líderes serán destruidos.”11
Todo esto, imagino, pudo haber convencido a los jefes yihadistas árabes palestinos de interpretar a la Corte Penal Internacional como aliado del yihadismo. Y sin duda el Fiscal Jefe de la CPI, Karim A.A. Khan, parece bastante amigable, en la foto hasta arriba, con el jefe de OLP/Fatah, el criminal yihadista internacional Mahmoud Abbas.
Hasta ahora, he sido cuidadoso en hablar de lo que parecen ser las percepciones de los jefes de Hamas y OLP/Fatah sobre la CPI y sus fiscales. Pero dichas percepciones no pueden—por sí solas—condenar a la CPI ni a sus fiscales de tener simpatías yihadistas. Después de todo, las percepciones de los jefes de Hamas y OLP/Fatah podrían estar equivocadas.
Debemos ser justos, entonces, con la CPI. Y eso implica juzgar a los fiscales de la CPI de acuerdo a sus propias acciones.
Por sus razonamientos los conoceréis…
Paso entonces a considerar la forma en que la CPI alegó ser competente para perseguir presuntos crímenes de guerra en Judea & Samaria (‘Cisjordania’) y Gaza.
¿Violó la CPI el derecho internacional al incluir a la AP como ‘Estado Parte’?
Para incluir a la Autoridad Palestina como ‘Estado Parte’ del tratado fundador y rector de la CPI—conocido como el Estatuto de Roma—la CPI definió un ‘Estado de Palestina’ que supuestamente comprende lo que llama ‘Cisjordania’ (su nombre real es Judea & Samaria) y Gaza.
Ésa fue una decisión legal interesante por las siguientes razones:
La ‘Autoridad Palestina’ ni siquiera controla las fronteras del territorio más amplio donde gobierna unos pocos municipios de forma autónoma.
Gaza ni siquiera ha sido gobernada localmente por la Autoridad Palestina.
Israel no reconoce a la Autoridad Palestina como Estado.
El último punto, como explica un experto en derecho internacional, es decisivo:
“El reconocimiento de un nuevo Estado esencialmente significa el reconocimiento legal de la transferencia de soberanía sobre un territorio de una autoridad a otra. Un organismo internacional, incluida la ONU, no puede simplemente desprender un territorio sin el permiso del ‘Estado anfitrión’ original. Hacerlo sería una violación de una de las reglas definitorias del sistema de Estados.”12 (énfasis añadido)
En línea con esta opinión, el juez Péter Kovács (PEH-ter koh-VAHCH) de la CPI—quien discrepara del fallo de la CPI para supuestamente establecer su jurisdicción sobre ‘Palestina’—hizo el siguiente comentario:
“es … bien sabido que Israel se ha opuesto a la admisión de Palestina como Estado Miembro de algunas organizaciones, enfatizando que ‘Palestina no es un Estado.’ ”13
Por lo tanto, hasta que no haya un reconocimiento formal del gobierno de Israel para un nuevo Estado en Judea & Samaria y Gaza, dicho Estado—legalmente—no existe. ¿Por qué? Porque Israel es el ‘Estado anfitrión’ y la transferencia de soberanía es un derecho propio, ya que solo Israel puede legítimamente reclamar soberanía sobre Judea & Samaria y Gaza.
Mi última afirmación, entiendo, pudiera levantar cejas debido a la forma en que nuestros creadores de significados institucionales nos han estado hablando. Siendo así, defenderé ahora cuidadosamente este punto—que solo Israel puede legítimamente reclamar soberanía sobre Judea & Samaria y Gaza—porque es una cuestión de derecho internacional y es eso, precisamente, lo que estamos considerando en este ensayo.
Solo Israel puede reclamar soberanía sobre los Territorios Disputados
Después de la Segunda Guerra Mundial, en 1946, el padre fundador del movimiento árabe palestino, el monstruo genocida Hajj Amin al-Husseini, responsable de co-liderar el exterminio nazi alemán de los judíos europeos, y su protegido Azzam Pasha, secretario general de la Liga Árabe, recrearon el Alto Comité Árabe como representante de los árabes palestinos.14
Actuando como tal, cuando la ONU votó en 1947 para dividir lo que quedaba del Mandato Británico de Palestina y crear allí un Estado judío ridículamente pequeño y un segundo Estado palestino (el primero fue el Reino de Jordania), Husseini rechazó la oferta, respaldado por los otros jefes árabes. No estaban interesados en un Estado palestino; lo que querían era impedir la creación de un Estado judío—cualquier Estado judío, por pequeño que fuere—.
Azzam Pasha—sin vergüenza alguna por el hecho de que Shoá (el Holocausto) venía de concluir—había anunciado previamente que si los judíos sionistas aceptaban la oferta de la ONU de un Estado judío, los Estados musulmanes lanzarían todos juntos
“una guerra de exterminio y una masacre masiva que será recordada como las masacres tártaras [mongolas] y las Cruzadas.”15
(Las guerras genocidas, cabe señalar, son el tipo de crimen que la CPI fue creada para perseguir).
Husseini sin duda sintió que un genocidio antijudío en Oriente Medio, el sueño que compartía con Hitler, estaba ahora a su alcance. Pero los Estados árabes perdieron la Guerra de 1948, e Israel fue establecido. Después de esto, la Liga Árabe organizó la expulsión de todos los judíos (¡sin sus propiedades!) que vivían en los Estados árabes—una población masiva—.16 El pequeño Israel hizo lo que pudo para absorber a la mitad de ellos. El resto emigró a otros lugares.
(La expulsión y el despojo forzado de una minoría, cabe destacar, son el tipo de crímenes que la CPI fue creada para perseguir).
Al término de la Guerra de 1948, Egipto se había instalado sobre Gaza y Jordania sobre Judea & Samaria. Desde entonces, las voces oficiales comenzaron a llamar a Judea & Samaria, en inglés, el ‘West Bank’ (la Ribera Occidental del río Jordán), y en castellano, ‘Cisjordania’ (‘cis’ en latín significa ‘de éste lado de,’ o sea, la Jordania de éste lado occidental del Río Jordán, porque el término lo inventaron los occidentales). Éstos son nombres que nunca antes se habían utilizado, y fueron introducidos en el discurso público para evitar que se usaran los nombres reales, Judea & Samaria, que han sido sus nombres durante miles de años, porque estos nombres claramente dicen que estos territorios son tierra de judíos y tierra de samaritanos (otro pueblo creyente en la Torá).
¿A quién pertenecían estos territorios? Ni Jordania ni Egipto podían reclamar soberanía legalmente, pues las guerras genocidas no pueden conferir un derecho legal; si lo hicieren, todo el derecho internacional colapsaría instantáneamente.
Y Husseini y el Comité Superior Árabe, representando a los árabes palestinos, ya habían rechazado la oferta de un Estado palestino en esos territorios, prefiriendo lanzar una guerra genocida para completar el crimen inconcluso de Hitler.
Además, la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), reconocida a partir de 1964 como representante de los árabes palestinos, declaró en su carta fundacional de 1964 (Artículo 24)—¿adivinen qué?—que Judea & Samaria (‘Cisjordania’) y Gaza no están incluídos en ‘Palestina.’17
Luego entonces, el estatus legal de estos territorios permanecía en el limbo.
El control material, sin embargo, estaba en manos de los ocupantes ilegales, Jordania y Egipto, quienes utilizaron estos territorios como plataforma para una nueva guerra de agresión genocida contra Israel en 1967. Gamal Abdel Nasser, presidente de Egipto y sucesor de facto de Azzam Pasha como líder de la Liga Árabe, anunció sus objetivos de la siguiente manera:
“No entraremos en Palestina [es decir, Israel] con su suelo cubierto de arena. Entraremos con su suelo saturado de sangre.”18
Y también dijo:
“… la batalla contra Israel será general y no estará confinada a un punto específico en las fronteras sirias o egipcias. La batalla será general y nuestro objetivo básico será destruir a Israel.”19
Pero los Estados árabes perdieron nuevamente. Al final del conflicto, Israel controlaba—entre otros territorios tomados de los agresores genocidas—Judea & Samaria y Gaza. Dado que Israel tomó estos territorios—¡con estatus indefinido!—defendiéndose de un ataque genocida, solo Israel puede legítimamente reclamar soberanía.
Es el mismo principio que aplica si me sacas una pistola en la cara y yo te la arrebato antes de que dispares. Tomarse en serio que debo devolverte el arma porque es ‘tu propiedad’ sería, por supuesto, caer en una locura (más aún si aquella arma ni siquiera era tuya). Esa pistola ahora es mía, lo siento.
Tampoco pueden tener reclamo legal quienes ya rechazaron la oferta de los Territorios Disputados de Judea & Samaria y Gaza en 1947, prefiriendo exterminar a los judíos israelíes.
Los puntos precedentes son completamente suficientes, pero si hiciere falta algo más, enumero a continuación tres consideraciones adicionales:
Estos territorios (Judea & Samaria y Gaza) habían sido incluidos en el acuerdo original para la creación de un hogar nacional judío, es decir, el Mandato para Palestina de la Liga de las Naciones (Conferencia de San Remo de 1920).
En 1922, cuando Winston Churchill (entonces Secretario Colonial) separó el territorio que llamó ‘Transjordania’ (hoy el Reino de Jordania) del Mandato de Palestina, restringió el asentamiento judío al ‘[territorio de] Palestina ubicado al oeste del [río] Jordán.’ Esto fue completamente arbitrario y violó el derecho internacional, ya que contravenía lo establecido por la Liga de las Naciones. Sin embargo, incluso en ese contexto, Judea & Samaria se incluyeron nuevamente en el territorio asignado para un hogar nacional judío.20
Como se mencionó anteriormente, la OLP—el representante internacionalmente reconocido de los árabes palestinos—había declarado explícitamente en su Carta original de 1964 que Judea y Samaria (‘Cisjordania’) y Gaza no estaban incluídas en la ‘Palestina’ que ellos reclamaban.21
De todo esto se desprende que ningún ‘Estado de Palestina’ puede existir legalmente en los territorios disputados de Judea & Samaria y Gaza a menos que, y hasta que, Israel, el único ‘Estado anfitrión’ legítimo de esos territorios, otorgue su reconocimiento formal.
Es notable que la CPI haya ignorado esta simple realidad legal cuando, en 2015, definió al llamado ‘Estado de Palestina’ como compuesto por los territorios de ‘Cisjordania’ (Judea & Samaria) y Gaza, y aceptó a la ‘Autoridad Palestina’ como un Estado Parte de la CPI. Decir que la CPI se aventuró aquí sería insuficiente; como el Coyote de los dibujos animados—el enemigo mortal del Correcaminos—, la Corte pisó un vacío.
¿Por qué osó la Corte Penal Internacional contravenir el derecho internacional? ¿Cómo entender este comportamiento escandaloso?
Una posible explicación es que la Corte Penal Internacional sea efectivamente una institución alineada con intereses yihadistas, como parecen creer los líderes de Hamás y la Autoridad Palestina. Pero no apresuremos conclusiones. Antes, consideremos la estrategia de la CPI en cuanto a su supuesta jurisdicción sobre Judea & Samaria y Gaza.
La solicitud de la Fiscal Jefe Fatou Bensouda para un fallo sobre jurisdicción
En términos legales, la ‘jurisdicción’ puede abordarse de dos maneras diferentes:
“La jurisdicción … es la autoridad práctica otorgada a un órgano legal para administrar justicia, tal como se define por el tipo de caso y la ubicación del problema …” (énfasis mío)22
No hay problema con el “tipo de caso”: las acusaciones de crímenes de guerra ciertamente entran en el ámbito de la CPI. ¿Qué hay sobre la jurisdicción territorial (“ubicación del problema”)? El documento fundacional y rector de la CPI, el Estatuto de Roma, establece:
“La Corte [la CPI] podrá ejercer sus funciones y facultades, según lo dispuesto en este Estatuto, en el territorio de cualquier Estado Parte” [Artículo 4(2)]23
En otras palabras, la Corte es un club: una organización de membresía voluntaria. Solo aquellos países que han firmado el Estatuto de Roma—los ‘Estados Parte’—han otorgado a la Corte jurisdicción en sus territorios.
Por lo tanto, la cuestión de la jurisdicción territorial no se presta a debates filosóficos o exámenes tácticos de precedentes legales; basta con consultar la lista de Estados Parte firmantes, ¡y listo! Si la inclusión del supuesto ‘Estado de Palestina’ fue legalmente válida, entonces la Corte tiene jurisdicción territorial sobre los municipios que gobierna la AP; pero si dicha inclusión no fue legalmente válida, entonces la Corte no tiene jurisdicción territorial.
Punto.
No obstante aquello, Fatou Bensouda solicitó un análisis formal y un fallo sobre la cuestión de la jurisdicción de la CPI sobre los territorios en disputa de Judea & Samaria y Gaza. ¿Por qué?
Aquí está la pista: en su Solicitud para un fallo sobre jurisdicción, Bensouda declaró que estaba:
“ ‘consciente … [del] hecho de que la cuestión de la condición de Estado de Palestina según el derecho internacional no parece haber sido definitivamente resuelta.’ ”24
Parece que Bensouda estaba “consciente” de haber actuado ilegalmente al admitir al supuesto ‘Estado de Palestina’ como miembro de la CPI, y que esperaba un fallo positivo sobre jurisdicción para oscurecer el hecho.
Por supuesto, dado que Bensouda efectivamente actuó ilegalmente en 2015 al incorporar al supuesto ‘Estado de Palestina’ a la CPI, la Corte no puede tener jurisdicción legal en Judea & Samaria y Gaza, y, por lo tanto, cualquier fallo positivo sobre la jurisdicción también sería ilegal.
Pero ¿por qué estaba actuando ilegalmente Bensouda?
La clave está en su declaración, también en la solicitud de fallo sobre jurisdicción, de que Judea & Samaria y Gaza están supuestamente “ocupadas por Israel,” lo que equivale a afirmar—en flagrante contradicción con su observación “consciente” anteriormente citada—que el ‘Estado de Palestina’ ya existe.
¿Por qué dicha implicación?
Porque Bensouda no está diciendo que los territorios en disputa pertenezcan a ningún otro Estado, por lo que solo pueden estar “ocupados por Israel” si, y solo si, Israel los tomó —y los tomó ilegalmente, cabe aclarar—cuando Judea & Samaria y Gaza ya eran el supuesto ‘Estado de Palestina.’ Pero ya hemos visto que esto es imposible. El Comité Superior Árabe—representando a los árabes palestinos—rechazó la oferta de estos territorios para un Estado en 1947; la OLP—nuevamente representando a los árabes palestinos—definió que estos territorios ni siquiera están incluidos en ‘Palestina.’
Todo el proceso de Bensouda es absurdo.
Lo que está claro es que los miembros del equipo de la CPI encargados de resolver la cuestión de la jurisdicción—receptores de la solicitud formal de Fatou Bensouda—, al ver la frase “ocupados por Israel,” debieron percibir en ella un mensaje claro, casi como un silbido para perros: Bensouda buscaba jurisdicción sobre Judea & Samaria y Gaza con el objetivo de luego pretender—en otra maniobra absurda—que dicha jurisdicción sobre los Territorios en Disputa le otorgaría fundamentos legales para procesar a israelíes por presuntos crímenes de guerra allí.
Todo esto es indicativo de un tribunal corrupto y parcial.
Quizás, entonces, como aparentemente creen tanto Hamás como la Autoridad Palestina, la CPI es, de hecho, una institución afín al yihadismo.
Para rematar, consideraremos a continuación el informe disidente escrito por el juez Péter Kovács (se pronuncia: Kovach), “el juez más veterano en la Corte Penal Internacional,” quien discrepó de la opinión mayoritaria. Kovács, quien presidió la Cámara de tres jueces que dictaminó sobre la jurisdicción, redactó una meticulosa refutación de 163 páginas en contra de la opinión de la mayoría.
Quedarán asombrados.
El Informe en Minoría
Tengan en cuenta, a continuación, que los números entre paréntesis son referencias a las partes relevantes del documento de Kovács (referenciado en la nota al pie), y que el Estatuto de Roma es el conjunto de reglas de la Corte Penal Internacional (CPI)—su ‘constitución,’ por así decirlo—.
El lenguaje legal suele ser seco; la prosa de Kovács es la excepción. Él reprende a sus dos colegas por sus “acrobacias con las disposiciones del [Estatuto] que no pueden ocultar la realidad legal” (13) y por “la negativa deliberada de la mayoría a considerar las reglas relevantes del derecho internacional” (279). Este tipo de acusaciones dramáticas—dispersas a lo largo del documento con fecundidad multifacética—son aderezadas por Kovács con una fuerte ironía y sarcasmo.
Por ejemplo:
“Si bien reconozco el profesionalismo de la Fiscal [Bensouda] y el valor de su análisis, mi impresión es que, al basar sus argumentos en presunciones, ella intenta evitar responder la verdadera pregunta: ¿pueden considerarse, hic et nunc en 2020-2021, Cisjordania [Judea & Samaria], Jerusalén Este, y Gaza ‘el territorio del Estado’ según las nociones bien establecidas del derecho internacional público?” (26)
Si Bensouda “intenta evitar responder la verdadera pregunta,” ¿puede estar actuando de buena fe? No lo creo. En tal caso, tampoco puedo creer que el juez Peter Kovács realmente reconozca su “profesionalismo … y el valor de su análisis.” Creo que eso es sarcasmo.
¿Y por qué sería esta pregunta—que si los territorios disputados pueden considerarse el ‘Estado de Palestina’—“la verdadera pregunta”? Pues porque si Judea & Samaria (‘Cisjordania’), Jerusalén Este, y Gaza no pueden considerarse el territorio del supuesto ‘Estado de Palestina,’ entonces ese Estado no existe, y la CPI actuó ilegalmente cuando aceptó a ese supuesto ‘Estado de Palestina’ como miembro, lo que a su vez significa que la CPI no tiene jurisdicción sobre esos territorios.
Empero, Bensouda afirma—asombrosamente—que la cuestión de la jurisdicción de la CPI puede determinarse ¡sin establecer jurídicamente si el ‘Estado de Palestina’ existe o no! Escribe Kovács:
“Vale la pena señalar que en la Solicitud, la Fiscal [Bensouda] caracteriza como innecesaria una evaluación de la condición de Estado de Palestina por parte de esta Cámara … y parece indicar una preferencia por que la Cámara no realice tal evaluación.” (32)
Desestimando por completo los deseos de la Fiscal Principal, este juez disidente plantea—y responde—la pregunta que la Fiscal ha intentado evitar: ¿Acaso la Autoridad Palestina gobierna un Estado?
Kovács responde a esta pregunta con un torrente de detalles forenses que rebosan de citas a precedentes de la ONU, a las regulaciones de la ONU, y a declaraciones explícitas de varios secretarios generales de la ONU, y considera meticulosamente, además, todo el derecho internacional aplicable. Concluye lo siguiente: cuando la Autoridad Palestina accedió a la CPI, “la condición de Estado de Palestina no estaba en absoluto (y sigue sin estar) resuelta dentro de las Naciones Unidas” (14-15). La Fiscal Principal Bensouda, como vimos antes, confesó lo mismo en su Solicitud.
Me veo obligado a hacer esta pregunta:
¿Cómo hicieron entonces los otros dos jueces, la Mayoría, para apoyar la opinión contraria en su Respuesta?
Kovács explica que
“La Solicitud [de la Fiscal Principal] y la Respuesta [de la Mayoría] siguen un razonamiento circulus vitiosus [círculo vicioso]” que depende de “una serie de presunciones interconectadas complejas” (17-18).
A pesar de no tener base alguna en la ley, acusa Kovács, estas presunciones participan en el argumento de la mayoría como hechos, o, más precisamente, “como presunciones irrefutables” (23). En otras palabras, Kovács acusa que, si la condición de Estado en el caso de Palestina no puede ser defendida legalmente, sus colegas simplemente la afirmarán.
La CPI, señala Kovács, fue mucho más allá de lo que incluso los diversos funcionarios de la Autoridad Palestina—y significativamente Mohammed Shtayyeh y Mahmoud Abbas (respectivamente, primer ministro y presidente de la AP)—se sienten cómodos declarando públicamente, ya que ellos estaban hablando del ‘Estado de Palestina’ como algo aún por realizar (254).
Pero, ¿qué argumentó entonces, en efecto, la Mayoría?
Debajo de toda la retórica, la maniobra clave de la Mayoría no parece ser otra cosa que esto: habiendo aceptado en 2015 a la Autoridad Palestina como ‘Estado Parte’ de la CPI, la Corte ahora está obligada a seguir manteniendo la ficción de que la AP es, de hecho, un Estado. ‘Ergo,’ la Autoridad Palestina es ‘el Estado de Palestina’ (53).
Kovács exclama:
“En lugar de usar argumentos legales, la Mayoría usa su propia percepción para probar su punto. En otras palabras, el razonamiento de la Mayoría es defectuoso debido a su lógica circular, donde las inferencias adecuadas no se hacen. El punto A prueba el punto A.” (62)
Además del razonamiento circular, la Mayoría recurre a trucos verbales.
Al invocar el artículo clave del Estatuto de Roma de la CPI sobre jurisdicción, la Mayoría optó por utilizar la palabra ‘Estado’ de formas novedosas y totalmente flexibles. ¿Por qué? Porque de lo contrario se verían obligados a considerar si la Autoridad Palestina es o no un Estado según el derecho internacional, algo que no querían hacer. Además, la interpretación tradicional de ‘Estado,’ como la misma Mayoría escribió claramente, “también tendría el efecto de hacer que la mayoría de las disposiciones del Estatuto [de Roma]… resultarían inaplicables para Palestina” (68; el énfasis es de Kovács).
En otras palabras, si la lógica elemental, el propio Estatuto de Roma de la CPI, o el significado simple del término ‘Estado’ en el derecho internacional, vuelven a la CPI ‘inaplicable para Palestina,’ entonces la Mayoría simplemente tira todo eso por la ventana. A lo que Kovács básicamente responde: ¡¿Que qué?!
“¿Entonces hemos de considerar errónea la jurisprudencia bien establecida … del Estatuto [de Roma] [sobre la cuestión de jurisdicción] porque no encaja en un caso … aislado ? Respeto profundamente el punto de vista de la Mayoría, pero debo enfatizar que este razonamiento contraviene tanto el derecho de la Convención de Viena como la propia jurisprudencia de la Corte [la CPI].” (70)
El sarcasmo aquí se torna violento. Este juez no puede sentir respeto, y mucho menos “profundo respeto,” por una maniobra que, en el artículo clave sobre jurisdicción, desecha tanto la Convención de Viena como la propia jurisprudencia de la Corte Penal Internacional. Y todo nada más para apoyar un argumento especial que vuelve “aplicable” a la CPI para Palestina.
Imagino al juez Kovács rechinando los dientes mientras escribe:
“Esto de rechazar las reglas y nociones establecidas del derecho internacional es inusual dado que la CPI es, en sí misma, un tribunal internacional, y la cuestión sub judice plantea múltiples interrogantes de derecho internacional.” (118)
Dice “inusual”—no quiso excederse—.
Sin embargo, Kovács parece perder toda paciencia frente al argumento de la Mayoría de que, dado que la Autoridad Palestina ha sido llamada ‘Estado observador no miembro’ en la ONU, esto debe forzarnos a concluir que “la Asamblea General estaba convencida de la ‘condición de Estado’ de Palestina.” (24)
¿Cómo defendió esto la Mayoría? No lo hizo, observó Kovács. Y es obvio por qué: “en opinión de la Fiscal [Bensouda], tal evaluación no está permitida ni se considera necesaria.”
Frente a esto, Kovács se empeña en realizar esa evaluación de todos modos y demuestra con erudición que, en el pasado, llamar ‘Estado observador no miembro’ a una entidad en la ONU nunca ha transformado a dicha entidad en un Estado (199-219).
Lo que Kovács no dice—quizás por cortesía (pero yo no soy tan cortés)—es lo siguiente:
Fue el secretario general de la ONU Kurt Waldheim—anteriormente oficial nazi en la Segunda Guerra Mundial y directamente activo en Yugoslavia, donde también operaba Hajj Amin al Husseini, mentor de Yasser Arafat—quien dio su calurosamente bienvenida a la ONU al protegido de Husseini, Yasser Arafat, bautizando a su grupo, OLP/Fatah, ‘Estado observador no miembro.’
Y—preguntémonos—¿por qué ha hecho todo esto la CPI? Es mucho esfuerzo, ¿no? ¿A qué obedecen todas estas “acrobacias” pseudo-legales de la Mayoría? En términos técnicos, su propósito es determinar qué territorios corresponden al ‘Estado de Palestina’ (para que la Corte pueda establecer dónde, exactamente, tiene jurisdicción). Y eso es lo más asombroso: que la Corte crea tener competencia alguna para decidir esto. Porque, incluso suponiendo que Israel pudiera—en algún momento futuro—reconocer la creación del (actualmente inexistente) Estado en cuestión, las negociaciones para determinar las fronteras de cualquier futura ‘Palestina’ están aún pendientes.
Pero dejaré que Kovács lo exprese en sus propias palabras:
“El problema real y persistente al responder la pregunta sobre el alcance geográfico de la jurisdicción de la Corte y la investigación de la Fiscal está vinculado al hecho de que, actualmente, no existen fronteras precisas y definidas ni a nivel bilateral entre Israel y Palestina ni a nivel multilateral.” (245)
Lo que ha hecho aquí la CPI es un absurdo legal puro. Es una corte canguro—QED.
La CPI no tiene jurisdicción.
Para concluir
Resumiré mis hallazgos.
Las acciones recientes de la Corte fueron a instancias de, y celebradas por, terroristas antisemitas vinculados desde sus orígenes con la Solución Final nazi, y responsables además de crear el Irán yihadista cuya misión es repetir la Solución Final en Israel.
La decisión de la Corte busca:
legitimar a dichos terroristas antisemitas con la dignidad de un Estado; y, mediante ese argumento,
convertir al Estado de Israel en un objetivo de investigaciones por presuntos crímenes de guerra.
Para lograrlo, la Corte ha desafiado:
todas las leyes internacionales vigentes;
el espíritu y la letra del documento fundacional y rector de la Corte, el Estatuto de Roma;
la propia jurisprudencia de la Corte sobre el Estatuto de Roma; y
la lógica más elemental, además de la moral básica.
Todo esto es consistente con la percepción tanto de Hamás como de la Autoridad Palestina de que la CPI es una institución favorable al yihadismo.
Somos testigos de una inversión orwelliana.
¿Qué quiero decir con esto?
Tras la Segunda Guerra Mundial, en el contexto del genocidio nazi recientemente concluido, la Shoá, donde perecieron entre 5 y 6 millones de judíos, se argumentó públicamente que era necesario crear un tribunal especializado, competente para investigar y procesar crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad.
Sobre la base de este argumento, se creó a la larga, finalmente, una pomposa ‘Corte’. ¿Y adivinen qué? Esa corte es la Corte Penal Internacional, o CPI.
Pero esta CPI, establecida tras discusiones motivadas por un genocidio antijudío, está presidida, al parecer, por musulmanes yihadistas que violan todos los principios del derecho internacional, sus propios precedentes, la lógica más elemental, y el razonamiento moral más llano para ayudar a los seguidores del exterminador nazi de los judíos europeos, Hajj Amin al Husseini, tan deseosos de concluir otro genocidio antijudío.
La guerra es paz. La libertad es esclavitud. La justicia es injusticia.
Vives en el mundo que Orwell vaticinó. (¿Qué vas a hacer?)
Hamas lauds ICC jurisdiction ruling: ‘Use all means to stop Zionist crimes’; Times of Israel; 6 February 2021; by TOI STAFF.
https://www.timesofisrael.com/hamas-lauds-icc-jurisdiction-ruling-use-all-means-to-stop-zionist-crimes/
‘The Ruling by the International Criminal Court: Background, Analysis, and Implications’; Israel Democracy Institute; 16 February 2021; by Amichai Cohen.
https://en.idi.org.il/articles/33752
‘Palestinian Authority Pays for the Murder of Jews’; Algemeiner; 5 July 2024; by Ephraim D. Tepler and Itamar Marcus.
https://www.algemeiner.com/2024/07/05/palestinian-authority-pays-for-the-murder-of-jews/
‘Blood money: The PA's terrorist reward system’; Israel Hayom; 21 August 2024.
https://www.israelhayom.com/2024/08/21/what-is-the-pa-pay-to-slay-program/
Para una documentación más completa y contextualizada recomendamos el libro de Edwin Black Financing the Flames. Black ha documntado con exquisito cuidado que nada en el presupuesto de la ‘Autoridad Palestina’ tiene precedencia sobre los pagos a los terroristas (o a sus familias, cuando el terrorista logra convertirse en ‘mártir’). De hecho, “los salarios de los terroristas ascienden [en su conjunto] a millones de dólares al mes.”
El dinero para esto viene de todo el mundo, inclusive de los gobiernos de Europa y Estados Unidos. Es una tremenda misión internacional.
Una cosa que menciona Black es que cuando no les pagan a tiempo y completo a los árabes palestinos que se han ganado salarios mata judíos, ellos pueden convertirse en un serio problema (después de todo, son asesinos consumados). Y eso hace brotar la siguiente reflexión: si los jefes de OLP/Fatah pueden mantener a estos hampones moderadamente disciplinados, esos jefes deben ser los orcos más temibles.
FUENTE: Black, Edwin. (2013). Financing the Flames: How Tax-Exempt and Public Money Fuel a Culture of Confrontation and Terror in Israel. Dialog Press. Kindle Edition. (pp.188-190, 204).
Black, Edwin. (2103) Financing the Flames: How Tax-Exempt and Public Money Fuel a Culture of Confrontation and Terror in Israel. Dialog Press. Kindle Edition. (p.189).
‘PA paying salaries to Hamas men in Israel’s prisons’; Jerusalem Post; 9 February 2011; by Khaled Abu Toameh.
https://www.jpost.com/Middle-East/PA-paying-salaries-to-Hamas-men-in-Israels-prisons
Palestine formally joins International Criminal Court; Aljazeera; 1 April 2015
https://www.aljazeera.com/news/2015/4/1/palestine-formally-joins-international-criminal-court
Who is Fatou Bensouda?; World Atlas
https://www.worldatlas.com/articles/who-is-fatou-bensouda.html
From the Ahmadiyya text, The English Commentary of the Holy Qur’an, p.1399
https://archive.org/details/TafseerEngCommQuranLong/page/n1397/mode/2up
From the Ahmadiyya text, The English Commentary of the Holy Qur’an, p.1399
https://archive.org/details/TafseerEngCommQuranLong/page/n1397/mode/2up
From the Ahmadiyya text, The English Commentary of the Holy Qur’an, p.1399
https://archive.org/details/TafseerEngCommQuranLong/page/n1317/mode/2up
From the Ahmadiyya text, The English Commentary of the Holy Qur’an, p.1399
https://archive.org/details/TafseerEngCommQuranLong/page/n1317/mode/2up
How does a country become a country? An expert explains; The Conversation; August 3, 2017; by Rebecca Richards
https://theconversation.com/how-does-a-country-become-a-country-an-expert-explains-81962
Judge Péter Kovács’ Partly Dissenting Opinion; N°ICC-01/18-143Anx1; February 2021 (311)
https://www.icc-cpi.int/RelatedRecords/CR2021_01167.PDF
The Arab League, then and forever: What is the Arab League hoping to achieve in Annapolis?; Historical and Investigative Research; 23 November 2007; from Understanding Annapolis, an HIR Series; by Francisco Gil-White
https://www.hirhome.com/israel/annapolis_2.htm#AHC
Barnnett, D. & Karsh E. 2011. Azzam’s Genocidal Threat. Middle East Quarterly. Fall. (pp.85-88).
https://www.meforum.org/3082/azzam-genocide-threat
Gil-White 2007. The Arab League, then and forever (op/ cit.)
https://www.hirhome.com/israel/annapolis_2.htm#war1948
Carta fundacional de la Organización para la Liberación de Palestina de 1964 (Article 24)
“Artículo 24: Esta Organización no ejerce ninguna soberanía territorial sobre Cisjordania en el Reino Hachemita de Jordania, sobre la Franja de Gaza ni sobre el Área de Himmah. Sus actividades se desarrollarán en el ámbito popular nacional en los campos de la liberación, la organización, la política y las finanzas.”
Para leer el artículo citado en la página de la ONU de la OLP:
Clicar la liga abajo, que te lleva a la página archivada de la ONU de la OLP.
Selecciona ‘Organización para la Liberación de Palestina’ en el menú de la izquierda.
Baja hasta ver ‘Palestine National Charter of 1964’
Clica la liga.
Baja hasta ver el Article 24.
https://web.archive.org/web/20060911085747/http://www.palestine-un.org/mission/frindex.html
Un poco más de contexto:
“Siria utilizó los Altos del Golán, que se elevan 3,000 pies sobre el nivel del Galilea, para bombardear granjas y aldeas israelíes. Los ataques sirios se intensificaron en 1965 y 1966, mientras la retórica de Nasser se volvía cada vez más belicosa: ‘No entraremos en Palestina con su suelo cubierto de arena,’ declaró el 8 de marzo de 1965. ‘Entraremos con su suelo empapado de sangre.’ ”
SOURCE: Howard Sachar. (1979). A History of Israel: From the Rise of Zionism to Our Time. NY: Alfred A. Knopf. (p. 616).
‘Statement by President Nasser to Arab Trade Unionists’; (May 26, 1967)
https://www.jewishvirtuallibrary.org/statement-by-president-nasser-to-arab-trade-unionists-may-1967
British White Papers: Churchill White Paper (June 3 1922); Jewish Virtual Library
https://www.jewishvirtuallibrary.org/churchill-white-paper-1922
Carta fundacional de la Organización para la Liberación de Palestina de 1964 (Article 24)
“Artículo 24: Esta Organización no ejerce ninguna soberanía territorial sobre Cisjordania en el Reino Hachemita de Jordania, sobre la Franja de Gaza ni sobre el Área de Himmah. Sus actividades se desarrollarán en el ámbito popular nacional en los campos de la liberación, la organización, la política y las finanzas.”
Para leer el artículo citado en la página de la ONU de la OLP:
Clicar la liga abajo, que te lleva a la página archivada de la ONU de la OLP.
Selecciona ‘Organización para la Liberación de Palestina’ en el menú de la izquierda.
Baja hasta ver ‘Palestine National Charter of 1964’
Clica la liga.
Baja hasta ver el Article 24.
https://web.archive.org/web/20060911085747/http://www.palestine-un.org/mission/frindex.html
Jurisdiction; Wikipedia.
https://en.wikipedia.org/wiki/Jurisdiction
The ICC’s Rome Statute
https://iccforum.com/rome-statute
SITUATION IN THE STATE OF PALESTINE; No:ICC-01/18-143; 5 February 2021; Before the Judges Péter Kovács, Marc Perrin de Brichambaut, Reine Adélaïde Sophie Alapini-Gansou (22)
https://www.icc-cpi.int/CourtRecords/CR2021_01165.PDF